Antonio Escribano Zafra es taurino y catedrático de Nutrición. Antonio Escribano va por ahí diciendo libremente que «la carne es necesaria para una buena salud», «hoy en día se ha puesto de moda no consumir carne y eso es un error», «la carne es fundamental para el deporte y el desarrollo infantil», «es falso el mito de que no hay que comer carne en la tercera edad» y otras barbaridades que están rebatidas por la ciencia de la nutrición y por millones de humanos sanos que no comen carne. Todo esto sin tener en cuenta que la Ética rechaza el maltrato animal[1], razón por la cual debemos practicar el veganismo.
Los prejuicios e intereses personales de Antonio Escribano distorsionan sus declaraciones sobre nutrición. En este artículo demostraremos nuevamente que es totalmente falso que para tener una buena salud se deba comer carne.
Salud sin carne
Las más grandes organizaciones profesionales de nutricionistas profesionales han afirmado públicamente que la alimentación vegetariana estricta (vegana) es saludable para todas las etapas de la vida.[2]
Baste nombrar, por ejemplo, a la Academia de Nutrición y Dietética de EEUU que, con más de 100.000 miembros, es la organización de profesionales de la alimentación y de la nutrición más grande de los Estados Unidos. En su informe «Position of the Academy of Nutrition and Dietetics: Vegetarian Diets» publicado en 2016 no sólo avala como sano el no comer carne, sino el no comer ningún producto de origen animal:
Traducción:
«Es la posición de la Academia de Nutrición y Dietética que las dietas vegetarianas, incluidas las veganas, planificadas adecuadamente son saludables, nutricionalmente adecuadas y pueden proporcionar beneficios para la salud para la prevención y el tratamiento de ciertas enfermedades. Estas dietas son apropiadas para todas las etapas del ciclo de vida, incluido el embarazo, la lactancia, la infancia, la infancia, la adolescencia, la edad adulta y los atletas.
Las dietas basadas en plantas son más sostenibles para el medio ambiente que las dietas ricas en productos animales porque usan menos recursos naturales y están asociadas con mucho menos daño ambiental.
Los vegetarianos y los veganos tienen un riesgo reducido de ciertas afecciones de salud, como cardiopatía isquémica, diabetes tipo 2, hipertensión, ciertos tipos de cáncer y obesidad. La baja ingesta de grasas saturadas y la alta ingesta de vegetales, frutas, granos enteros, legumbres, productos de soya, nueces y semillas (todos ricos en fibra y fitoquímicos) son características de las dietas vegetarianas y veganas que producen niveles más bajos de colesterol de lipoproteínas de baja densidad total y baja y un mejor control de la glucosa en suero. Estos factores contribuyen a la reducción de la enfermedad crónica.
Los veganos necesitan fuentes confiables de vitamina B-12, como alimentos fortificados o suplementos.» —Academy of Nutrition and Dietetics (EEUU), «Position of the Academy of Nutrition and Dietetics: Vegetarian Diets», December 2016, Volume 116, Issue 12, Pages 1970–1980.
Como vemos, las declaraciones de Antonio Escribano son contrarias a la Realidad. Aquí huele a conflicto de intereses… En junio de 2018, se declaraba antivegano y ya estaba defendiendo a la industria de la carne, según una noticia de la agencia EFE: «El sector de la carne está perdiendo el partido contra el veganismo», donde dice que le parece «injustificado y ridículo» que el veganismo se oponga a la barbarie que ocurre en granjas, mataderos, barcos pesqueros, etc. ¿Dónde se dejó olvidada la Ética este individuo?
Deporte sin carne
Además, cada vez existen más deportistas que se pasan a una alimentación vegetariana estricta (vegana), demostrado así que la carne no es ni siquiera necesaria para ser fuerte, ágil y resistente. La ciencia de la nutrición también avala la alimentacion vegetariana estricta (vegana) para deportistas profesionales.[3]
Contra la mentiras de Antonio Escribano
En Twitter, Dani Cabezas respondía a Antonio Escribano de manera impecable. A continuación, y con su permiso, voy a transcribir todos los tuits del hilo:
Os voy a hablar de #AntonioEscribano, ese nutricionista que hoy aparece en infinidad de medios echando pestes del veganismo y llamando al consumo de carne. Lamentablemente, este hilo no tendrá la repercusión que sus palabras han encontrado en esos medios, pero ahí va👇 pic.twitter.com/LQmYVBTQQY
— Dani Cabezas (@danicabezas1) February 19, 2020
Os voy a hablar de #AntonioEscribano, ese nutricionista que hoy aparece en infinidad de medios echando pestes del veganismo y llamando al consumo de carne. Lamentablemente, este hilo no tendrá la repercusión que sus palabras han encontrado en esos medios, pero ahí va.
Escribano lleva años colaborando estrechamente con la industria cárnica: seminarios, charlas, mesas redondas, congresos… Su relación con los grandes conglomerados empresariales del lobby (Provacuno, Interporc, Asici o la plataforma Carne y Salud) es pública y notoria.
Algunos recordaréis el nombre de esa última plataforma. Es la misma que organizaba charlas para niños y niñas de Primaria en las que transmitía la importancia del consumo de carne en el marco de la feria Meat Attraction, organizada por la propia industria: «El lobby de la carne transmite la importancia de su consumo al alumnado de Primaria de los colegios públicos de la Comunidad de Madrid»
«Carne y Salud» también es el nombre de una cátedra de la Universidad de Barcelona financiada (oh, sorpresa), por el propio lobby cárnico español:
Se trata del mismo lobby que pagó estudios para contradecir a la OMS y a expertos de primer nivel para defender sus intereses en los medios y «evangelizar a la población» en favor del consumo de carne: «El lobby español de la carne pagó estudios para contradecir a la OMS»
Escribano dice que ser vegano es «una moda irresponsable y peligrosa». Miente por partida doble: ni es una moda (ha habido quien han rechazado el consumo de productos de origen animal desde los Pitagóricos) ni es irresponsable ni peligrosa. Nos centraremos sólo en esto último.
El primer argumento que surge para desmontar esa supuesta peligrosidad son los propios veganos. Valga mi ejemplo: siete años sin consumir productos animales, más sano que nunca, y así lo atestiguan mis análisis. Idéntico es el caso de todas las personas veganas que conozco.
Ni yo, ni ninguna persona vegana de mi entorno (y son muchas) ha tenido «falta de energía, anemia, pérdida de masa muscular» o incluso de «capacidad intelectual», los terribles males que vaticina Escribano que nos esperan si no comemos carne.
De hecho, la lista de deportistas de élite que llevan una dieta vegetariana estricta es inmensa. Escribano debería saberlo, ya que además de alabar la carne en los medios se dedica a asesorar a deportistas.
Lo que sí está sobradamente probado es la relación entre diabetes, obesidad, enfermedades cardiovasculares e incluso cánceres relacionados con el consumo excesivo de productos de origen animal y ultraprocesados cárnicos.
A ello se une, de forma paralela, la preocupante y creciente escasez de verduras, fruta y legumbres en nuestra dieta, especialmente en la de los más jóvenes. Pero eso no parece preocupar a Escribano. Ya sabemos que lo suyo es la carne.
Conviene recordar que organismos de prestigio como la Asociación Americana de Dietética, avalan que «una dieta vegana equilibrada y bien planificada es una opción perfectamente sana y equilibrada a nivel nutricional».
Escribano dice que el veganismo lo defiende «cualquier famoso» a base de «cuatro teorías sin ninguna base científica». Así de primeras se me ocurren un buen puñado de nutricionistas de prestigio, como @Midietacojea o @Dimequecomes que le podrían explicar las cosas mejor que yo.
Pero no se vayan todavía, que hay más: Escribano deja caer que la carne es necesaria porque contiene B12. Asegura que «los veganos tienen que tomar suplementos», lo que para él demuestra la insuficiencia de una dieta libre de productos de origen animal.
Que no lo sepa el cuñao medio de Twitter, pase. Que lo ignore un supuesto profesional de la nutrición, ya no. Expliquémoslo una vez más: la B12 es una vitamina de origen bacteriano, no animal, de la que necesitamos una cantidad ínfima, pero esencial para vivir.
Esa pequeña cantidad de B12 se encuentra, por ejemplo, en la tierra que hemos eliminado al lavar los alimentos que comemos. Si la carne contiene B12 es porque, entre infinidad de antiobióticos, su pienso es suplementado artificialmente con B12, que se fija a sus músculos.
Dicho de otra manera: un vegano compra B12 y se toma un comprimido a la semana. Un no vegano come animales que a su vez han ingerido toneladas de B12 de forma artificial. Con dibujos siempre se entiende mejor:
«No podemos obviar la realidad, y es que somos omnívoros», dice Escribano. De nuevo toca recordarlo: ser omnívoro no implica que necesitemos la carne, sino que podemos digerirla. Y cocinada, claro: pruebe usted a darle un mordisco a un cerdo en crudo, Antonio, verá que risas.
La carne no es un «alimento fundamental» que «necesitamos consumir», como asegura Escribano en cada entrevista. Como el resto de productos de origen animal, prescindir de ella es perfectamente posible a un nivel nutricional. Y mucho más sencillo de lo que algunos creen.
Como es lógico, no entro a valorar el que para mí es el principal motivo para no consumir productos de origen animal: el sufrimiento y la explotación que hay detrás de una de las industrias más atroces del planeta y que, como es bien sabido, más contribuyen a su destrucción.
Y termino con una recomendación obvia: desconfiad de los «expertos» que digan que tal o cual alimento concreto es fundamental para vivir. Especialmente si tiene vínculos claros con una de las industrias más poderosas que existen. Por muchos medios que amplifiquen sus mentiras.
Y con este repaso que Dani Cabezas hace a las falacias y falsedades de Antonio Escribano acabamos por hoy. Actualizaré este artículo con nuevos datos, si los hubiera.
Fundamental que conozcamos y propaguemos el mito de carne y B12
Hago copia y pega de los dibujitos
Hola, Luisa.
Sí, es un mito decir que «se necesita comer carne para estar sano». Es un mito promovido por quienes venden carne. Y la vitamina B12 ya sabemos que la producen bacterias, así que a comerlas 🙂
El copia y pega de los dibujitos que dices no aparece.
Saludos.
Buenas tardes David!
Ante todo gracias por el artículo. Muchos se darán cuenta de que este tal Antonio Escribano no tiene razón en cuanto a la necesidad de comer carne por la especie animal humana. A este tal Escribano le estan dando mucha difusión a pesar de que lo que está diciendo es erróneo, pero ya sabemos que poderoso es don dinero y la vida y salud de los animales no humanos les importa más bien nada.
Un saludo, compañero.
Hola, Javier.
¡Muchas gracias a ti por comentar!! 🙂 Cada cierto tiempo aparece alguno al que le dan publicidad contra el veganismo para promover el maltrato animal que implica el consumo de carne y de otros productos y servicios de origen animal. Es una lucha muy desigual, pero tenemos la razón (ÉTICA) y los buenos sentimientos de nuestro lado.
Saludos.